Tu hijo, tan pequeño, tan frágil. Apenas puedes quitarle los ojos de encima, aunque cada noche de desvelo por cuidar a tu pequeñín te cueste un día entero tambaleándote de sueño. Muchas madres no pueden resistir la ternura y, disfrazándola de necesidad de velar el descanso de sus bebés, los llevan a dormir con ellas. Y esto no se restringe a una sola noche.
Que han de ser independientes desde pequeños, que se van a malacostumbrar… las leyendas son innumerables, pero en este post haré el intento de hallarle el lado más verosímil a estas creencias. Comencemos.
1 ‘Si duerme con su madre, se volverá inseguro’
Todo lo contrario, se sabe que ocurre lo contrario: los niños que reciben más afecto y que tienen más contacto físico con sus padres y madres crecen más seguros.
2. ‘Si duerme con alguien más podría morir’
Asegúrate de tener suficiente espacio para ti, tu pareja -en caso te acompañe- y tu nene. La Foundation for the Study of Infant Deaths (Fundación para el Estudio de la mortalidad infantil) recomienda que padres e hijos no compartan cama porque la mayoría de niños que ha fallecido súbitamente mientras descansaban han estado acompañados por mamá o papá. La verdad es que esto ocurre cuando los padres no toman las medidas de seguridad básicas.
3. Todos los bebés duermen mejor con sus padres
Generalizar es absurdo, especialmente si se trata de criaturitas tan complejas como los bebés humanos. Así que si tu sobrino duerme como un angelito al lado de su madre, pero tu hija se sofoca si no está solo en su propia cuna, no hay nada de raro en ello.
4. Entonces, ¿dormirá mejor solito?
Oh, vamos, concédete el placer de disfrutar este tiempo con tu bebé. De hecho, Nils Bergman, un neonatólogo director de la Maternidad del Hospital de Mowbray, en Sudáfrica, señala que los niños que duermen con sus madres hasta los 3 años se estresan menos. Al no sentir el miedo de estar lejos de la figura materna, duermen mejor. Eso sí, cada bebito es diferente, conoce al tuyo.
5. ¿Cuál es el peligro inmediato de dormir con tu bebé?
Jamás, jamás te recuestes a su lado bajo los efectos de alcohol o drogas, ni mucho menos vistiendo joyas que pudieran ahogarlo, o ropa que pueda asfixiarlo. Si tienes sobrepeso, también evita dormir profundamente cerca a él.
Y tú, ¿duermes al lado de tu bebé?, ¿cómo lo cuidas? Y si no, ¿por qué no lo haces?
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