Ejercicios de preparación para el parto

El parto es un momento decisivo y que llena de ansiedad a muchas mamás, especialmente si son primerizas. Es cierto que el trabajo físico del parto se compara al trabajo físico realizado por un competidor olímpico, y así como un deportista de alto rendimiento, las futuras mamás también disponen de ejercicios de entrenamiento que preparan sus músculos para este momento crucial.

A continuación les mostramos cuatro ejercicios simples que ayudan a fortalecer y ayudar a mejorar la circulación de áreas estratégicas de su cuerpo.

KEGELS
Este ejercicio sirve para fortalecer el suelo pélvico (grupo de músculos que sostienen la vejiga, uréteres, útero y recto). Al mejorar la circulación de esta área se favorece la recuperación de desgarros que puedan ocurrir durante el parto, y también en caso haya sido necesario realizar una episiotomía. La mejora de la circulación en el área anal también evita la aparición de hemorroides y previene de sufrir de incontinencia post parto.

• Puede practicar el ejercicio sentada, leyendo, viendo televisión, o de pie. Apriete los músculos alrededor de la vagina, como si estuviera intentando interrumpir el chorro de orina en el baño y cuente hasta cuatro, luego relaje los músculos. Empieza con unos cuatro y sube hasta llegar a 10 con la práctica.
• Puede practicarlo unas tres veces al día.

GATO ENOJADO

• Coloque las manos y las rodillas en el piso, manteniendo los brazos rectos. No abra ni cierre mucho los brazos y piernas, deben estar de acuerdo a la amplitud de los hombros y las caderas, respectivamente. A medida que inspira apriete los músculos abdominales y baje la posición de las nalgas como queriendo acercarlas hacia el estómago.
• Relaje y vuelva a la posición normal mientras suelta el aire.
• Repita a su propio ritmo, dependiendo de su respiración.

CUCLILLAS
Esta es la posición natural del parto. Estos ejercicios preparan todos los músculos que intervienen en el alumbramiento, los que se encuentran en el área pélvica.

• Póngase en cuclillas de cara al espaldar de una silla. Los pies deben estar ligeramente más abiertos que la amplitud de la cadera y los pulgares mirando hacia fuera (formando una “V”). Ayúdese con la silla para mantener el equilibrio.
• Contraiga los músculos del abdomen, eleve el busto y relaje los hombros. Aproxime el cóccix al suelo, como si se estuviera sentando relajada en una silla. Balancee su cuerpo de modo que el peso descanse sobre los talones.
• Tome aire y luego exhale mientras se levanta concentrándose en hacer el movimiento con sus muslos.

POSE DEL ZAPATERO O COBBLER
Este ejercicio ayuda a relajar las articulaciones de la cadera y a aliviar la presión o dolor de la parte baja de la espalda. Recibe su nombre de la posición en que los zapateros hindúes son retratados.

• Siéntese en el suelo o sobre una toalla doblada con la espalda recta apoyada en una pared y las plantas de los pies tocándose la una con la otra.
• Delicadamente, presione las rodillas hacia abajo intentando que toquen el piso, pero no las fuerce.
• Manténgase en esta posición tanto tiempo como se sienta cómoda.
• Recuerde, como en todo ejercicio, debe empezar de menos a más. Verá como poco a poco se hacen más fáciles.

Fotos: Mindbodyspirit, Themomcrowd, Lilbabycakes.

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